«Guarrindongadas» en el Mc Donald’s

No os lo voy a negar, de vez en cuando me (nos) gusta darnos una sesión de «Guarrindongadas™» en alguna cadena famosa de hamburgueserías, y esta vez le ha tocado al Mc Donald’s de Gandia.
Son esos días tontorrones, que sales de currar y no te apetece cocinar y decides darte un festival calórico. Eso si, con Coca Cola Zero… xD
Bien, poco podemos aportar del lugar en cuestión, visitado normalmente por gente joven y chiquillería, no sabemos exactamente si por la rapidez del servicio (a veces) o por el precio económico (que para nada lo es) de sus menús.
Económico no es que lo sea, ya que de media sueles salir con los menús a unos 8€ si quieres disfrutar de la experiencia completa, eso es, menú con sus pataticas o ensalada para los más sanos, unos aperitivos tipo McNuggets® o similares, y por supuesto el famoso McFlurry® o Sundae.
Por eso decimos que no es un sitio económico, ya que en cualquier bar de barrio puedes comer de menú o pegarte un festival bocadillero por ese importe o menos. Pero bueno, caro tampoco es.

Llamadme tonto, pero no soy de los conspiranoicos que creen que la carne es de dudosa procedencia, ni de que le añaden aditivos adictivos ni nada de eso. Yo creo que este tipo de negocios están muy vigilados por sanidad y que deben pasar muchos controles de calidad. Es más, las cocinas suelen ser sitios muy limpios y las exigencias de higiene de los trabajadores suelen estar muy vigiladas.
Una gran marca como Mc Donald’s no se puede/debe permitir una mala publicidad por «cosas extrañas».
Evidentemente no vamos a encontrar carne de Kobe, pero es que tampoco lo pretenden…

Bueno, y sin dar más vueltas, vamos al lío, y el lío es, el análisis de lo que anoche nos sirvieron.

Empezamos por la famosa McExtrem Top Chef, tan promocionada por el programa de televisión.
La idea es buena, la mezcla de ingredientes, preparación y demás te atrae, y el cartel en grande que hay en el restaurante te hace pensar que será una grata experiencia. Y lo es, pero en un nivel mucho más bajo de lo esperado.
Te esperas algo parecido a esto:

Y lo que te encuentras es algo así:

Evidentemente no podemos exigir la misma presentación, pero si algo más de mimo en la preparación de los ingredientes y montaje de la hamburguesa.

El sofrito que incorpora tampoco está bien distribuido y nos obliga a hacerlo a nosotros mismos para que toda la hamburguesa tenga un sabor por igual en cada bocado.

¿Y como es la experiencia? Bueno, pues no está mal, tiene un sabor distinto a las demás por la salsa, que además le da un toque picante muy suave bastante divertido. Pero creo que algo más de salsa le iría bien, ya que algunos bocados saben bastante parecidos a las normales.

El pan es distinto a los demás, y hoy en nuestro caso estaba un poco reseco por los lados, hasta notar alguna mordida algo dura.

Seguimos con una McExtrem original, acompañada de patatas Deluxe. 

El asunto de la preparación/comparación con la foto es la misma, así que no insistiré en lo mismo.

En este caso es una hamburguesa doble, con queso Cheddar, tomate y cebolla roja.

Personalmente me chifla la cebolla, en cualquier variedad, pero cruda me parece que en este caso sobresale demasiado su sabor y a mi se me queda siempre ese regustillo a cebolla que no me gusta.

El pan estaba EXTREMADAMENTE quemado (igual por eso se llama McExtrem…), como se puede ver en la foto. Hasta el punto que algún bocado el pan crujía. Tanto al Glotón Rojo como a mi nos dio la sensación de que estaba algo reseco y algún bocado incluso crujía. 

El resultado de esta hamburguesa es muy similar al resto disponibles, con un punto distinto quizás por la cebolla roja y poco más.

Por último pedimos un Mc Roll de pollo y queso.

Es una buena combinación de tortilla parecida a las fajitas, rellena de pollo empanado, lechuga, queso y una salsa especial. 

Es algo distinto a las hamburguesas y personalmente creo que es todo un acierto el haberlo incluido en su carta. 

Los pedazos de pollo suelen ser generosos y el punto suele ser bastante bueno, con un crujiente que, como su nombre indica, cruje como debiera.

Por último mencionar las clásicas patatas fritas, que en este caso estaban algo blandengues y frías.

Y las siempre deliciosas Deluxe, acompañadas de su salsa especial. Con estas patatas da la sensación de estar comiendo «más patata».

Un detalle que me llamó la atención: Me dio la sensación de que las bebidas se han «Europeizado», ¿no? En mi caso pedí refresco grande y el vaso me pareció mucho más pequeño de lo habitual. ¿Como es el refresco pequeño?

Creo que, al precio que están los menús, y a lo que les cuestan los refrescos (y el hielo que le ponen), deberían de hacer algún tipo de promoción a lo Foster con bebidas rellenables las veces que quieras. En el KFC por ejemplo lo hacen, te dan el vaso y tu te rellenas lo que quieras y las veces que quieras.

Ahí queda la sugerencia.

Por último acompañamos este calórico menú con los clásicos McNuggets de pollo y las bolitas de pollo Chicken  McBites, que al final no son más que pequeños McNuggets.

Mojados en la salsa barbacoa son una delicia.

Para terminar no podemos olvidar a ese gran invento que es el McFlurry, el que se merece toda una ovación.

No es raro que vayamos alguna vez a propósito al Mc Donald’s para disfrutar de uno de estos.

En este caso nos decantamos por la combinación Huesitos y chocolate.

Cuando aciertan con la cantidad perfecta de topping y salsa de chocolate es toda una experiencia.

No hay nada peor que llegar al final del helado y que solo quede helado sin nada de chocolate…

Recomiendo no pedirlo a la entrega del menú, vale la pena ir a por él después de terminarlo y disfrutarlo recién hecho. Si no, todo es un caldo cuando llega el momento de disfrutarlo.

Por cierto, me viene a la mente haberlo probado alguna vez con el chocolate caliente, ¿puede ser?

Para finalizar, añadiré un detalle que no nos gustó nada, y es que el restaurante tiene horario de apertura hasta las 0 horas, y no entendemos como una hora antes ya están limpiando y recogiendo parte del comedor.

Todos trabajamos y nos gusta salir a hora, por supuesto, pero empezar una hora antes del cierre nos parece del todo fuera de lugar. 

No es nada agradable estar cenando y que una chica esté barriendo y con el recogedor al lado tuyo, la verdad.

Además, que para personas como nosotros que no nos gusta molestar, la sensación de estar siendo un estorbo para un trabajador nos incomoda bastante, sinceramente.

Así se encontraba el comedor a las 23:25 de la noche. Incluso a clientes que querían entrar en esa parte del comedor no se les permitía.

Pienso que si un restaurante tiene un servicio hasta la hora «x», debe dar su servicio completo hasta dicha hora, o como mucho, 10 o 15 minutos antes. ¿O acaso se recortan los precios conforme llega el cierre? Al menos a nosotros no nos informaron de ello…

Y hasta aquí mi review del Mc Donad’s.

Sí, repetiremos. No somos muy asiduos al lugar, pero de vez en cuando nos gusta guarrindonguear™

Por: Glotón Blanco